MEDITACIÓN SOBRE LAS SIETE PALABRAS QUE DIJO JESÚS.

VIERNES SANTO (Ayuno y Abstinencia)

PASIÓN DE NUESTRO SEÑOR  JESUCRISTO 

A punto de culminar su pasión  y muerte   en una  cruz  en  expiacion por nuestros pecados, nuestro Señor Jesucristo nos deja un testamento a través de las siete palabras que son recogidas de los cuatro evangelistas. Tres de San Lucas, tres de San Juan y la central es tomada de San Mateo y Marcos.

Primera Palabra:

¡ PERDÓNALES PORQUE NO SABEN LO QUE HACEN! 

Lc 23, 24

Fue la envidia lo que condujo a Jesús al calvario. Sabían sus asesinos que era un hombre bueno e inocente. Lo sabían los que pidieron su muerte, como los que aclamaron y como el que permitió su muerte, Pilatos. 

Yo también hago lo mismo cuando el pecado me hace sucumbir y no quiero reconocerlo. No quiero pedir perdón, por ende, no busco su misericordia, porque no hay pecado que Dios no pueda perdonar.

Segunda Palabra

¡TE ASEGURO QUE ESTARÁS CONMIGO EN EL PARAÍSO!

Lc 23,43

El buen  ladrón con mucha fe imploró piedad y lo acogiste  Señor. El fue un enemigo presencial en tu pasión. Hoy, también  sigo siendo tu enemigo y me oculto en la oscuridad del  pecado y lo confieso Señor. Pero estoy seguro que tendrás compasión de mí, si me arrepiento.

Tercera Palabra:

¡HE AQUÍ A TU HIJO,   HE AQUÍ A TU MADRE! ( Jn 19,26)

En su testamento Jesús nos dejó un tesoro muy valioso. Nos dejó a su madre la Virgen Santísima. Hoy comprendo esa confianza que tuvo Jesús antes de morir y la aceptamos Señor a tu madre, a nuestra Madre como intercesora ante ti.

Cuarta Palabra:

DIOS MÍO, DIOS MÍO, ¿POR QUÉ ME HAS ABANDONADO?

Mt 27,46

Te viste desamparado mi Señor Jesús, pero fue mi pecado el que te causó ese agobio, pero hoy quiero consolarte y quitar un poco tu dolor, prometiendo no volver a pecar.

Quinta Palabra:

¡TENGO SED!

Jn 19,28

Tuviste sed Señor y te dieron hiel para beber en lugar de un hisopo  con agua límpida. Y ese fue mi pecado, el que te hizo sentir la necesidad de buscar mi conversión y por amor a ti Señor, no te  haré desfallecer. 

Sexta Palabra:

¡ TODO ESTÁ CONSUMADO!

Jn 19,30

Con firme voz anunciaste a pesar de estar tan lastimado y sin fuerzas, que tu misión se había cumplido por dar tu vida por nosotros.  Y qué  te puedo decir Señor ante semejante sacrificio,  de aquí en adelante prometo, hacer tu voluntad. 

 Séptima Palabra:

¡ PADRE, EN TUS MANOS ENCOMIENDO MI ESPÍRITU!

Lc 23,46

Encomendaste tu espíritu a tu eterno Padre y si todo lo que hiciste, morir en una Cruz y resucitar al tercer día  si esto para mi no fue suficiente, ¿ a dónde voy a parar?...