CUANDO ESTÉS EN MISA, APAGA TU CELULAR.

La presencia de teléfonos celulares en lugares sagrados, ha generado preocupación debido a la falta de respeto percibida durante los servicios religiosos.

La etiqueta comúnmente aceptada es apagar o poner en modo silencioso los dispositivos electrónicos durante eventos religiosos o cualquier otra situación que requiera silencio y respeto.

Muchas personas se salen del Templo como algo normal para atender su celular, cuando todos están concentrados en la Homilía que imparte el sacerdote. Sin embargo, es común que algunas personas olviden apagar sus teléfonos o se vean tentadas a revisarlos durante la misa, lo que puede causar interrupciones y distracciones.

El sonido de un teléfono sonando durante la celebración, incluso si está en modo de vibración, puede ser bastante perturbador en un entorno de adoración tranquilo. Esto interrumpe no sólo la concentración de la persona que tiene el teléfono, sino también la de los demás asistentes.

El uso de teléfonos celulares durante los servicios religiosos puede interpretarse como una falta de reverencia hacia el lugar sagrado. Muchas personas consideran que estos espacios son sagrados y requieren un comportamiento respetuoso.

Incluso si la persona no recibe llamadas o mensajes, la tentación de revisar el teléfono puede distraerla de la experiencia espiritual y la conexión con la feligresía.

En algunas comunidades, el uso de dispositivos electrónicos durante servicios religiosos puede ir en contra de las normas culturales y religiosas establecidas. 

Para abordar este problema, algunas congregaciones han implementado políticas de colocar un letrero visible que diga; "apaga tu celular" o han hecho anuncios previos a través de los monitores,  recordando a los asistentes la importancia de silenciar celulares, para mantener la concentración y el respeto durante la  celebración eucarística.

El uso de teléfonos celulares en lugares de culto como es el templo, donde asistes a Misa especialmente los domingos, es un tema que varía en importancia y percepción según las creencias y prácticas de cada comunidad religiosa. La comunicación abierta y el establecimiento de normas claras pueden ayudar a abordar este problema y fomentar un entorno de adoración más respetuoso.

La práctica comúnmente aceptada en muchos entornos, incluyendo eventos religiosos como la Santa Misa, es apagar o poner en modo silencioso los dispositivos electrónicos. Esta norma se basa en el respeto hacia el entorno y hacia los demás asistentes, ya que ayuda a mantener un ambiente tranquilo y sin distracciones durante momentos de adoración a Dios, reflexión  que requieren silencio y concentración.

Apagar o silenciar los teléfonos celulares es una forma de demostrar consideración hacia los demás y de reconocer la importancia del espacio y el momento del encuentro con el Señor. Además, esto ayuda a evitar interrupciones innecesarias que podrían afectar la experiencia de quienes participan en el evento.

Esta práctica de etiqueta no sólo se aplica en entornos religiosos, sino también en otros lugares como teatros, salas de conciertos, conferencias y cualquier situación en la que la interrupción y el ruido puedan resultar inapropiados. Es una forma de promover un comportamiento respetuoso y consciente en la sociedad.

No te olvides, durante la Misa, apaga tu celular ...

“Que el Señor nos bendiga y la Virgen nos proteja”

Tu amiga

Mirtha Villarroel de Rocha