ORACIÓN DE AGRADECIMIENTO A NUESTRO AMADO DIOS, ANTES QUE COMIENCE UN NUEVO AÑO.

En este momento de reflexión, me sumerjo en la gratitud y me postro ante Ti, con un corazón rebosante de agradecimiento por el año que hemos vivido. Aunque las dificultades no fueron ajenas en el diario de la vida de cada hija/hijo tuyo, por las persecuciones a nuestra Iglesia Católica, encarcelamiento de obispos y sacerdotes, por la falta de trabajo, crisis conyugales, violencia intrafamiliar, enfermedades y hasta feminicidios que agobian y desestabilizan a muchos hogares, pero reconozco que Tú, siempre presente, pues, no permitiste que abandonaran la barca.

En momentos en que el timón amenazaba doblegar las fuerzas y desviar el rumbo trazado, Tú, fiel faro tanto en mi vida como en la de mis hermanos, interviniste para enderezar el curso. Aunque las aguas a veces parecían turbulentas, Tú eres nuestra guía constante, nuestra esperanza inquebrantable.

Doy gracias en nombre de mi familia, parientes cercanos y lejanos amigos (as), por las nuevas amistades que nos han fortalecido y por las bendiciones que hemos recibido en formas que a veces ni siquiera comprendemos, por el entorno laboral y personas de todo el mundo que no sé ni siquiera sus nombres, por tu amor incondicional, que ha sido mi refugio en medio de las tormentas. Has sido la luz que disipa la oscuridad y la fuerza que sostiene mi espíritu cuando la carga parecía abrumadora. Tu gracia ha sido mi ancla en momentos de incertidumbre.

Aunque enfrenté desafíos, agradezco por cada paso que me has permitido dar y por las lecciones valiosas aprendidas en el camino. 

Así, con un corazón humilde pero fortalecido, me dispongo a abrazar el nuevo año. Que mi fe me ayude a perseverar en la adversidad. Que siga remando hacia adelante, confiando en que tu amor y tus propósitos me conducirán hacia aguas más serenas.

 Con humildad, reconocemos que sólo con Tu gracia podemos enfrentar el nuevo año con esperanza y confianza. Que tu luz ilumine nuestro camino en cada paso que demos.

Con el corazón abierto, te pedimos que bendigas el año nuevo que se avecina. Que esté lleno de oportunidades para crecer, de momentos para amar y de ocasiones para ser instrumentos de Tu paz en el mundo.

Que podamos vivir cada día con propósito y gratitud, sirviendo a otros a través de las obras de misericordia, como Tú nos has enseñado.

 “Que el Señor nos bendiga y la Virgen nos proteja”

Tu amiga

Mirtha Villarroel de Rocha