¿CUÁLES SON LOS DOGMAS DE LA VIRGEN MARÍA?

Ya hablamos de lo significa una creencia y los Dogmas de Fe

Nos limitaremos a describir los dogmas marianos. Que son las creencias centrales y oficialmente definidas sobre la Virgen María en la teología católica.

Existen cuatro dogmas marianos principales:

La Inmaculada Concepción: Este dogma sostiene que María fue concebida sin pecado original. Fue proclamado como dogma por el Papa Pío IX en 1854 en la bula "Ineffabilis Deus". Esto significa que María, desde el momento de su concepción, estuvo libre de cualquier mancha o pecado original.

La Maternidad Divina: Este dogma afirma que María es la Madre de Dios. Este título fue reconocido en el Concilio de Éfeso en el año 431. Declara que María dio a luz a Jesús, quien es tanto completamente humano como completamente divino, y, por lo tanto, ella es la Madre de la segunda persona de la Trinidad.

La Perpetua Virginidad: Este dogma sostiene que María permaneció virgen antes, durante y después del nacimiento de Jesús. Esto significa que María nunca tuvo relaciones sexuales ni tuvo otros hijos después de Jesús. Esta creencia ha sido sostenida por la Iglesia desde los primeros tiempos del cristianismo, aunque no fue formalmente definida como dogma hasta más tarde.

La Asunción de María: Este dogma proclama que al final de su vida terrenal, María fue llevada al cielo en cuerpo y alma. Fue declarado como dogma por el Papa Pío XII en 1950 en la constitución apostólica "Munificentissimus Deus". Esto significa que, a diferencia de la mayoría de las personas que mueren y cuyos cuerpos se degradan en la tierra, el cuerpo de María fue preservado y ascendió al cielo.

Estos dogmas marianos son creencias fundamentales para los católicos y han sido parte integral de la tradición católica durante siglos. Es importante tener en cuenta que otras denominaciones cristianas pueden tener puntos de vista diferentes sobre la Virgen María y pueden no aceptar todos estos dogmas.

Pero para los católicos los dogmas son verdades que se consideran infalibles y que todos los fieles estamos obligados a aceptar como parte integral de nuestra fe.

¡Que el Señor nos bendiga y la Virgen nos proteja!

Tu amiga

Mirtha Villarroel de Rocha

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