SÉ QUE NO PODEMOS CAMBIAR EL MUNDO, PERO QUE PONGAMOS UN GRANITO DE ARENA, SE HACE LA DIFERENCIA.

Definitivamente, yo sé que no podemos cambiar el mundo porque puede ser mucho o muy poco lo que hacemos, pero estoy segura que podemos hacer una gran diferencia con nuestro "granito de arena". Todas las pequeñas acciones cuentan y pueden tener un impacto positivo en nuestro entorno familiar, laboral y con la gente con la cual compartimos y/o pertenecemos, hasta poder encontrar un lugar en este mundo para desarrollarnos a pesar de las circunstancias adversas o la falta de oportunidades aparentes.

Que nuestra vida sea atractiva a través de nuestras obras para poder  beneficiar al prójimo, esto es parte fundamental de la ética y la moral cristiana. La idea es que, al hacer el bien y ayudar a otros, no sólo estamos cumpliendo con nuestro deber como seres humanos, sino que también estamos reflejando la bondad de Dios y dando testimonio de su amor y compasión hacia todos sus hijos.

Es necesario desarrollarnos como personas y hacer el bien a nuestro prójimo, siempre digo que la vida no es fácil, más aún, si estamos pasando por situaciones de enfermedad, económicas, la falta de trabajo, problemas familiares, violencia,  si nos ponemos en el zapato del otro, si ayudamos a que salgan adelante de alguna manera, podemos ser una fuente de inspiración y ayuda para otros, con ese granito de arena no nos quedemos sin aportar, para contribuir a crear un mundo mejor para todos.

Ayudar a alguien en necesidad, ofreciendo una palabra amable, una mano amiga o simplemente escuchando a alguien que necesita hablar y compartir su dolor, eso es amor, solidaridad y empatía.

Otra forma, es compartir tus conocimientos y habilidades con los demás, enseñando a otros en lo que te has capacitado, no hay que guardar nuestro aprendizaje.

Recuerda que cada pequeña acción que realizas puede marcar una gran diferencia. A medida que más personas se unen para hacerla, el impacto colectivo puede ser aún mayor.

Por lo tanto, no subestimemos el poder del granito de arena para cambiar el mundo.

Que el señor nos bendiga y la virgen nos proteja

tu amiga

Mirtha Villarroel Hurtado.

Comentarios

Entradas populares de este blog